Luego de décadas de espera, finalmente avanza la construcción del Desvío de Giardino, una obra que organizará la llegada del tránsito pesado a las terminales portuaria de Timbúes. Una alternativa al “embudo” de la 91 y la 11 que tanta calidad de vida le costó a la región. El proyecto que lleva varios meses de ejecución, avanza con los trabajos en la infraestructura de un nuevo puente, de 140 metros de extensión que cruzará el río Carcarañá y le dará un acceso rápido y directo a los camiones hacia las plantas agroexportadoras.

En esta etapa, el movimiento de maquinaria se focaliza en el cruce del río, donde se están ejecutando las bases y apoyos principales. Esto explica la menor actividad visible sobre el resto del recorrido, donde anteriormente se desarrollaban tareas de nivelación y apertura del camino.

El proyecto incluye además nuevos tramos pavimentados que conectarán la Ruta Provincial 91 sobre la Autopista Rosario–Santa Fe, y obras complementarias como la reubicación de líneas eléctricas de alta tensión, licitada recientemente por Vialidad Provincial con un presupuesto superior a 1.700 millones de pesos.

El Desvío Giardino permitirá agilizar el acceso de camiones a los puertos, descomprimir rutas locales y mejorar la seguridad vial en toda la región productiva. Se estima que el proyecto esté finalizado para finales de 2026.

“Las obras que hay que hacer”

Esta semana en el marco de las elecciones nacionales, la vicegobernadora Gisela Scaglia recorrió junto al senador por Iriondo Hugo Rasetto el avance de las obras y visibilizó la importancia trascendental de la inversión santafesina.