Por primera vez, la Argentina enviará trigo al mercado chino, uno de los más grandes y exigentes del mundo. El primer embarque será de 65.000 toneladas y saldrá desde el puerto de Timbúes, operado por COFCO, la empresa estatal china con fuerte presencia en el país.
En los registros marítimos también aparecen otros barcos programados, como el Obsession y el Anastasia K, con cargas menores. Sin embargo, algunas de estas salidas todavía no están confirmadas por las compañías y podrían tener destinos alternativos. Aun así, el movimiento refleja un interés creciente por el cereal argentino.
China habilitó oficialmente la compra de trigo argentino el año pasado, luego de incorporar a varias empresas nacionales en su sistema de control sanitario. Con esa apertura, la Argentina pasó a tener la posibilidad de venderle a un país que es el tercer mayor importador mundial de trigo.
Este primer envío llega en un momento ideal: La cosecha nacional alcanzará 25,5 millones de toneladas, un récord histórico impulsado por rindes muy altos y un clima que acompañó toda la campaña. Con semejante producción, se espera exportar 17,5 millones de toneladas, con Brasil como destino principal y nuevos mercados en crecimiento.
Según el analista Eugenio Irazuegui, el trigo argentino está bien posicionado en el mundo gracias a un precio competitivo cercano a los US$209 por tonelada. En los puertos del Gran Rosario se nota claramente: hay un fuerte ingreso de camiones y un ritmo acelerado de embarques.
Aunque China es el mayor productor mundial de trigo, cada año necesita complementar su oferta con compras externas. Para esta campaña, podría importar alrededor de 6 millones de toneladas. Con esta primera operación desde Timbúes, la Argentina comienza a meterse en un mercado que puede abrir nuevas oportunidades comerciales a futuro.

