Hace un año, la llegada de tres pequeñas al mismo tiempo llenó de alegría y asombro a todo Maciel. La noticia del nacimiento de Regina, Rihanna y Rebeca recorrió la región y conmovió a quienes siguieron de cerca esa historia de amor, esperanza y fortaleza. Hoy, esas mismas niñas soplan su primera velita, sanas y felices, rodeadas por el cariño de su familia y la comunidad.

Su mamá, Andrea, recuerda con emoción lo vivido desde aquel día. “Estamos más que felices y agradecidos a la vida. Fue un año lleno de amor. Con Diego, su papá, vamos codo a codo, lo cual hace todo más llevadero. Son sanitas, duermen por la noche, no tenemos explicación para tanta simpleza“, expresó en diálogo con IRÉ.

En su casa, la rutina cambió por completo, pero también se llenó de nuevas sonrisas. Entre mamaderas, juegos y siestas compartidas, las trillizas crecen junto a su hermano Lorenzo, que las cuida y mima con ternura. “Ellas son todo lo que está bien en esta casa“, resume Andrea.

Durante este primer año, la familia recibió el cariño constante de los vecinos, amigos y del personal médico que acompañó aquel nacimiento tan especial. “Nos sentimos muy acompañados. Fue un año de aprendizaje, de amor, de mucha unión“, contaron, recordando que el apoyo de su entorno fue clave para sobrellevar los desafíos que trae criar a tres bebés al mismo tiempo.

Hoy, mientras la familia celebra este primer cumpleaños triple, en Maciel vuelven a aparecer los mismos sentimientos que hace un año: Emoción, ternura y orgullo. Las trillizas, esas tres pequeñas que hicieron historia en el pueblo, siguen creciendo rodeadas de amor, llenando cada rincón de la casa con sus risas y su luz.