El violento episodio tuvo lugar durante las primeras horas de este sábado, en Maciel. Un hombre de 43 años regresó a su casa alcoholizado de la isla y discutió con su pareja adelante del hijo mayor de esta, quien saltó a defenderla. El masculino los intentó atacar y allí observaron que estaba armado. Al arribo de la policía también los increpó. Y cómo si fuera poco, quiso romper el mobiliario en la comisaría. Terminó detenido.

De acuerdo confirmó IRE, pasada la media noche de ayer, el personal policial fue convocado a un domicilio por un violento episodio. Al parecer, una mujer les manifestó que momentos antes hubo un problema familiar, cuando su pareja regresó de la isla alcoholizado y discutió con ella y su hijo, mayor de edad, que salió en su defensa. 

Tras el periplo, el joven lo empujó, éste se golpeó el codo y esto hizo que se enojara aún más. Por lo que salió de la casa. Pero poco después regresó armado con un palo en búsqueda de pelea. Allí vieron que debajo de la remera, a la altura de la cintura, portaba dos armas blancas. 

Al llegar los efectivos, intentaron dialogar con el masculino que estaba en un importante estado de nerviosismo y le secuestraron los cuchillos. Inmediatamente opuso resistencia, ingresando en la vivienda, negando su detención y propinando a viva voz agravios verbales al personal actuante, en presencia de su hija menor de cinco años y su pareja.

En medio de la compleja situación, el personal policial le propuso a la víctima si deseaba radicar formalmente la denuncia y ella se negó, sólo requirió que sea trasladado al hospital para que lo tranquilicen.

Una hora después, siendo aproximadamente a la 01.20 el hombre se presentó en la comisaría reclamando que le devuelvan sus cuchillos. Al tiempo que comenzó a patear las sillas y la mesa de la guardia policial, con claras intenciones de romper el mobiliario, razón por la cual procedieron a su aprehensión.

El fiscal en turno, Maximiliano Nicosia, ordenó que se le formule la causa que antecede y recupere su estado de libertad.