Por mensaje de texto. Asi se enteraron los trabajadores de la empresa Serodino de que “habia cerrado las puertas”. Este mediodía representantes de la empresa y los choferes firmaron un acuerdo, a través de una conciliación obligatoria, de dar marcha atrás al paro y a los despidos. Pero sólo quedó en expectativas. 

A las 13.40 era el primer servicio que salía desde el galpón de ruta 91, donde hasta hace unas horas se llevó adelante la medida de fuerza y una manifestación de vecinos en apoyo a la medida de fuerza y pidiendo más frecuencias en el servicio de pasajeros. 

La sorpresa se dio al llegar a la empresa, porque las puertas seguían cerradas. Poco antes hubo una notificación por parte de una empleada administrativa al grupo de Whats App de la firma que notificaba que “No sale ningún servicio porque la empresa se cerró”. 

La conmoción se anuda con la incertidumbre, la angustia y el enojo. “Somos 22 familias, quizas un poco más, las que desvincularon. Mas a esta altura del año”, dijo Nestor uno de los choferes. 

Y siguió: “Nosotros no queriamos llegar a esto, lo que buscabamos era un mejoramiento del sueldo, un retroactivo y del básico que se aplicó en todas las empresas de la zona”. 

Las versiones son muchas, pero hasta el momento las certezas pocas. El servicio público debería seguir funcionando porque tiene una adjudicación por parte del ministerio de Transporte, y eso se convierte en esperanza: “Nosotros nos quedamos a la expectativa para ver que va a hacer el ministerio de Trabajo, después el de Transporte. Y si entra otra empresa que nos tenga en cuenta, queremos seguir manteniendo la fuente de trabajo”.