Las complicaciones en la circulación por la gran afluencia de camiones que llegan a los puertos de la región, sumado al fuerte temporal, dejaron como saldo numerosos accidentes de tránsito en la zona. Los vecinos no pueden llevar a los chicos a la escuela ni salir a trabajar, por las noches las bocinas son imposibles. En paralelo, los transportistas aguardan a la vera de los caminos sin seguridad ni condiciones sanitarias. Otro años más, el caos se adueñó del operativo de cosecha gruesa.

“No puedo salir ni para llevar a los chicos a la escuela”, “Tengo los ingresos cerrados, y para ir a trabajar tardo largas horas”, “No paran de sonar bocinas, no se puede dormir”, fueron algunos de los mensajes que enviaron a IRE los vecinos de Villa La Ribera. El caudal de camiones no cesó, más allá del temporal, y las colas se hicieron eternas tanto en ruta provincial 91, como en autopista o ruta nacional 11. 

En simultaneo, los transportistas manifiestan su enojo por la tasa de mantenimiento de caminos que deben abonar que ronda entre los 700 y 900 pesos cuestionando los accesos en mal estado, las largas horas sobre las rutas sin medidas sanitarias ni de seguridad y el deficiente sistema de organización para el ingreso a las plantas cerealeras.


Accidentes sin cesar: Al menos seis en el fin de semana 

Ante el gran flujo de camiones, y la desorganización para su ingreso a los puertos las malas maniobras están a la orden del día. En éste fin de semana, además se sumó el mal clima con copiosas lluvias. 

En el repaso del fin de semana, alrededor de las 5.40 de la madrugada del viernes, un Fiat Palio impactó contra un camión con acoplado sobre el kilómetro 28 de la autopista, a la altura de Villa La Ribera. Más allá de los daños materiales, ninguno de los conductores sufrió heridas de gravedad. En tanto que la calzada quedó reducida hasta que se removieron los vehículos.

Luego, a las 15.30 horas, en el kilómetro 15, mano ascendente, un camión Volkswagen con semirremolque y un Fiat Cronos entraron en colisión. A bordo del rodado mayor iba un hombre de 45 años y en el auto una mujer de 40, ambos resultaron con heridas leves.

Horas más tarde, sobre el kilómetro 60, a la altura de Maciel, un Fiat Iveco despistó en medio de la copiosa lluvia y terminó sobre el césped lateral, cruzando la banquina. El conductor de 55 años resultó ileso.

En la madrugada del sábado, aproximadamente la 1.30, un conductor perdió el control del auto e impactó contra el guardarrail sobre el kilómetro 16 de la autopista, jurisdicción de San Lorenzo. El Chevrolet Corsa sufrió importantes daños, entre ellos, en su equipo GNC, que comenzó a perder fluido poniendo en peligro al conductor de 44 años, quien pudo descender por sus propios medios del vehículo que pertenece a una empresa de seguridad privada. Personal de Bomberos Zapadores trabajó para controlar y obturar la pérdida de gas.

Luego, a la altura de Maciel sobre Autopista en el kilómetro 60, dos camiones y un automóvil colisionaron. Afortunadamente, más allá de la violencia del siniestro no resultaron heridos. Pero, mientras las autoridades realizaban el valizamiento para retirar a uno de los vehículos de gran porte sobre la calzada, otro camión perdió el control y terminó volcando.