La provincia comenzó a colocar medidores de control de velocidades en distintos puntos de la Autopista Brigadier López. Ya instalaron uno a la altura de la localidad de Oliveros y otro en jurisdicción de Monje.
Las tareas se desarrollaron sobre el kilómetro 31, entre Oliveros y La Ribera. También entre los kilómetros 63 y 64 en jurisdicción de Monje. Allí colocaron carteles electrónicos ubicados en ambas manos de la traza, que indicarán a qué velocidad circulan los vehículos.
Si bien por el momento tendrá la función de concientizar, no se descarta que se adapten cámaras del tipo fotomultas para sancionar a los infractores que excedan la velocidad máxima permitida que es de 130 km/h.
Por otra parte, se informó que desde el km 37 al km 39, sentido a la ciudad de Santa Fe, altura de la localidad de Oliveros, la calzada se encuentra reducida por obras de repavimentación.