Enmarcados en un panorama complejo y desalentador para los productores lecheros, el pasado viernes se llevó a cabo en Totoras una reunión en la que participaron el Senador del departamento Iriondo, Hugo Jesús Rasetto, el secretario de Lechería de la provincia de Santa Fe, Pedro Morini, el Intendente de la ciudad totorense, Horacio Carnevali, y representantes del sector tambero con el objetivo de buscar soluciones a la crisis que sufre el sector lechero.
La crisis lechera se agudiza día a día y la solución no parece estar a la vuelta de la esquina. En nuestra provincia y en el interior de la Argentina, cierra según estadísticas un tambo por día y se prevé que en Santa Fe, durante el próximo mes medio centenar esté cerrando sus puertas.
La problemática radica en el desfase que existe entre lo que recibe el productor por el litro de leche y lo que lo paga el consumidor final en el supermercado. Mientras que los lecheros tienen un costo de $4 por litro de leche, sólo reciben $2,60, y en la góndola se paga alrededor de $17.
Asimismo, según manifiestan desde el sector tambero, en los últimos meses aumentaron los costos para insumos y además, luego de la baja en las retenciones al maíz y a la soja, sus costos de producción se incrementaron.
En la reunión de este viernes en la ciudad de Totoras, los funcionarios elevaron un pedido a Nación para que se convoque a una mesa de diálogo, que involucre a los representantes de la industria, los sectores comerciales y los productores, a fin de encontrar soluciones para subsanar la crisis que sufre el sector.
El plan lanzado en enero pasado por el presidente de la Nación, de entregar a los tamberos un subsidio de 40 centavos por litro de leche, no basta para palear la crisis del sector y esperan nuevas medidas.
El lunes, productores lecheros se autoconvocaron en la autopista Rosario-Córdoba donde reclamaron por mejoras en los precios y en la rentabilidad y se estipula que de no implementarse rápidas medidas, volverán nuevamente a manifestarse.