Tata Rápido comenzó hace apenas una semana a prestar gran parte del servicio de transporte público de pasajeros que antes ofrecía Serodino SRL, pero los vecinos que son usuarios frecuentes, se encontraron con que ya no podían pagar con la tarjeta SUBE. Ante el reclamo, desde la firma indicaron que están “acelerando los trámites para intentar obtener la autorización correspondiente y los equipos para implementar el sistema”, con prioridad en los recorridos que sumaron recientemente.

Fuentes oficiales de Tata Rápido explicaron a IRE que para poder trabajar con el sistema SUBE, la firma debía estar adherida a Nación Servicios mediante una autorización del Gobierno Nacional, gestionada por la provincia. Además, primero debían tener las máquinas canceladoras.

Si bien la empresa había intentado durante mucho adherir, indicaron que habían quedado para la última etapa junto a Espiga de Oro y otras empresas de la provincia, pero cuando todo iba en marcha, irrumpió la pandemia de coronavirus.

Otro problema que traba el traspaso a SUBE es la importación, según explicaron. Desde la firma aseguraron que en este momento no hay máquinas que les puedan brindar y en consecuencia, Nación Servicios no puede hacer acceder a Tata al sistema, hasta que no estén los equipos.

Aseguraron además que no se trata de una decisión de la empresa, sino que hay no hay una posibilidad física por el momento, porque no hay equipos. En ese sentido, indicaron que Rosario firmó ahora para trabajar con SUBE, pero aún no tienen las canceladoras.

En tanto, afirmaron que las gestiones ya están hechas y que en los últimos días los trámites “tomaron velocidad para intentar tener la autorización y los equipos para implementar”. “Se está trabajando para eso”, sostuvieron. 

Una vez habilitado el sistema en la firma, se implementará primero en las líneas que sumaron recientemente, como San Genaro, Serodino, Totoras, Puerto San Martín, Ricardone, Aldao. En el resto de los recorridos, se evaluaría más adelante conforme a las posibilidades.

Por el momento, otro medio de pago que está vigente desde hace más de 10 años es con la tarjeta de la propia empresa, que se obtiene a través de los choferes y se carga en el propio colectivo. También se puede personalizar para en caso de extravíos, no perder el saldo.