En el marco del Día Nacional del Derecho a la Identidad y el 43 aniversario de la fundación de Abuelas de Plaza de Mayo, una vecina de Pueblo Andino, que vivió sus primeros años en cautiverio contó su testimonio, reivindicando la importancia de la lucha para recuperar la identidad de niños y jóvenes secuestrados durante la última dictadura cívico-militar.
“Por cinco minutos no fui una beba robada y hoy mi familia me estaría buscando”, confió Ivana, reflejando lo que fueron los años más crueles y violentos en la historia del país, marcados por asesinatos, torturas, secuestros y todo tipo de violaciones a los Derechos Humanos.
Es que a los tres meses de su gestación, los padres de Ivana fueron incluidos en las “listas negras” y comenzaron a ser perseguidos por razones políticas e ideológicas, tal como comentó la vecina, y esto obligó el exilio de su familia hacia Cosquín, donde finalmente nació ella.
Siguiendo esa misma línea, detalló: “Al año de mi nacimiento, mi madre y yo fuimos encarceladas y trasladadas al batallón 121 de Rosario y luego a la cárcel de Ezeiza, donde estuvimos hasta finales del año 1982 en el pabellón 21”.
Y continuó: “Me separaban periódicamente de mis padres. Durante ese oscuro mes y medio, no tuve contacto con mi madre, quien fue trasladada violentamente a la maternidad clandestina de Devoto, a parir a mi segundo hermanito”. El niño nació en cautiverio y la madre fue amenazada constantemente de que le robarían a su hijo.
Ya con anterioridad, el primer hermano de Ivana había sido asesinado a los ocho meses de gestación “por una vacunación masiva y sutil mala praxis en Ezeiza, que le provocó a mi madre un aborto químico, violento y doloroso, el cual presencié”, confió.
“A mis 5 años ya habiendo visto todos los horrores de la privación ilegítima de la libertad y la pérdida de todos los derechos humanos fundamentales, pude saber lo que era la libertad. Aún así fui usada como botín de guerra por parte de los militares genocidas”, finalizó Ivana.
Asimismo reivindicó la importancia de la lucha para recuperar la identidad de niños y jóvenes secuestrados durante la última dictadura cívico-militar.
“Es muy importante que ante cualquier duda de identidad de los nacidos entre el 1976 y 1983 se hagan la muestra de ADN”, manifestó. Si dudás de tu identidad comunicate con Abuelas de Plaza de Mayo.