La empresa Obring SA, con sede en Rosario, fue elegida para hacerse cargo de la concesión del puente Rosario-Victoria y su corredor vial, en el marco del nuevo esquema de gestión privada impulsado por el gobierno nacional. La firma rosarina administrará el tramo por un plazo de hasta 30 años, luego de presentar la propuesta más competitiva en la licitación pública.

El contrato incluye el mantenimiento integral del viaducto y de los cerca de 60 kilómetros de extensión que conectan ambas ciudades. En su oferta, Obring estableció un peaje de $3.385,80, un valor inferior al tope fijado por el Estado, que era de $4.050.

Durante los primeros meses de gestión, la empresa deberá encarar obras de reparación urgentes, entre ellas bacheo, repintado, sellado de fisuras y mejoras estructurales. El objetivo es recuperar sectores deteriorados por el paso del tiempo y garantizar un tránsito más seguro para los miles de vehículos que cruzan a diario.

El puente Rosario-Victoria, inaugurado en 2003, es una infraestructura estratégica para la región: Une las provincias de Santa Fe y Entre Ríos, forma parte del corredor bioceánico y sostiene un intenso flujo de vehículos particulares y de carga. La adjudicación a una firma rosarina representa un hecho significativo para la economía local, al poner en manos de una empresa de la región la gestión de una conexión clave para el desarrollo productivo.

Con esta concesión, Obring amplía su participación en proyectos viales de gran escala y asume el desafío de mantener una vía esencial para el litoral argentino. El nuevo esquema prevé control estatal sobre tarifas y obras, buscando equilibrar la inversión privada con la prestación eficiente del servicio y un mantenimiento sostenido en el tiempo.