El gobierno provincial comenzó a implementar una prueba piloto en Rosario con el reparto de 200 armas de baja letalidad entre los policías de la ciudad. El programa incluye 100 pistolas Taser y 100 lanzadoras Byrna, dispositivos diseñados para ser utilizados en situaciones de riesgo sin recurrir a armas de fuego. Las Taser, que emiten descargas eléctricas, y las Byrna, que lanzan proyectiles con sustancias irritantes como gas pimienta, permitirán a los agentes manejar situaciones de agresión de manera más controlada y segura. Esta iniciativa será evaluada en Rosario antes de ser expandida a otras ciudades de la provincia.

“Estamos haciendo las primeras pruebas, tenemos capacitado al grupo de instructores en ambas armas, que ya estan entregadas, y en los próximos días y semanas vamos a estar entrenando”, explicó el ministro de Seguridad y Justicia, Pablo Cococcioni.

“Estamos haciendo las primeras pruebas, tenemos capacitado al grupo de instructores en ambas armas, que ya estan entregadas, y en los próximos días y semanas vamos a estar entrenando”, explicó el ministro de Seguridad y Justicia, Pablo Cococcioni

Y anunció: “Rosario va a ser una ciudad que va a ser un punto focal, porque esto es una prueba piloto. No es que lo van a tener todos los policías de la provincia. Rosario va a ser uno de los lugares donde vamos a desplegar mayor cantidad de estos recursos y después los vamos a desplegar a otros puntos”.

 “Rosario va a ser una ciudad que va a ser un punto focal, porque esto es una prueba piloto. No es que lo van a tener todos los policías de la provincia. Rosario va a ser uno de los lugares donde vamos a desplegar mayor cantidad de estos recursos y después los vamos a desplegar a otros puntos”.

El uso de las Taser y las Byrna estará regulado por un protocolo específico que detalla cómo y cuándo deben ser empleadas estas armas en relación con la amenaza que enfrenten los agentes. El protocolo establece un enfoque gradual en el uso de la fuerza, permitiendo que los policías respondan con medidas menos letales antes de recurrir a opciones más graves, como el uso de armas de fuego.