Fueron momentos de mucha tensión y angustia que afortunadamente terminaron con un final feliz. Dos pequeños estaban solos en su casa cuando en la madrugada un mueble comenzó a arder en llamas, el fuego se propagó y les tapó la puerta principal de la casa, por lo que no podían salir. Vecinos notaron el humo y alertaron a la policía que estaba haciendo su recorrido de rutina. Los oficiales no dudaron: el subjefe Ocampo se metió por una ventana y su compañero de guardia el sub oficial Farley los esperó del otro lado. Los dos niños de 6 y 8 años fueron revisaron en el SAMCo y se encuentran bien. Bomberos sofocaron el incendio.

Todo sucedió muy rápido y fueron momentos claves para preservar a los niños. Durante la madrugada, la mamá se ausentó y dos hermanitos de 6 y 8 años quedaron durmiendo en su casa. El inconveniente fue que, por causas que se desconocen, un ropero comenzó a incendiarse. Las llamas consumieron el mueble que terminó obstruyendo la puerta de ingreso y se propagó rápidamente, con los pequeños asustados en el interior.

Vecinos empezaron a sentir el olor del humo y sorprendidos salieron a ver de qué se trataba cuando detectaron que la casa estaba ardiendo. Inmediatamente convocaron con señas al móvil policial que estaba en las inmediaciones y los efectivos tuvieron un rol clave a la hora del rescate.

El panorama detallaba un foco ígneo de magnitud, en el cual las llamas salían desde el interior de la vivienda por una puerta lateral y la puerta ubicada frente al domicilio, que se encontraba bloqueada. Adentro todo cubierto estaba cubierto de un espeso humo, y a los chicos llorando.

No lo dudaron y decidieron actuar. El subjefe de la comisaría, sub inspector Jonatan Ocampo ingresó por una ventana, acudió hasta donde estaban los nenes y tratando de calmarlos los sacó del lugar. Del otro lado, los recibió su compañero de guardia, el sub oficial Pablo Farley. Una vez que estuvieron fuera de peligro, convocaron a Bomberos Voluntarios para que sofocaran el incendio.

Asimismo derivaron a los niños de 6 y 8 años al SAMCo donde le practicaron primeros auxilios, les colocaron oxígeno y confirmaron que se encontraban en buen estado de salud. Sólo preocupados y asustados por lo ocurrido. Poco después llegó la mamá quien manifestó haberse ausentado por un momento.