Durante el fin de semana una familia oliverense encontró en el patio de su casa, en pleno centro, un ejemplar de víbora yarará. Pese a que el alerta en la región por inundación continúa, el río Carcarañá no presenta una gran suba como se dio en los primeros meses del año pasado donde también se encontraron ejemplares de reptiles peligrosos. Las recomendaciones.

Son varias las víboras que se encontraron desde el crecimiento del río en los últimos meses, pero sorprendió en esta ocasión que se haya localizado una vez más en pleno casco urbano. Llamó la atención, debido a las características en las que se movilizan con abundante vegetación como por ejemplo en pastizales altos. El reptil fue encontrado en el patio de la familia Zamarini por calle General Roca al 300 el viernes.

Otra localidad que se encuentra en alerta, incluso aún con los ríos crecidos, es Puerto Gaboto donde desde la comuna local brindaron detalles de qué hacer en caso de encontrar la presencia de éstos animales, y hasta incluso de mordedura.

Desde la Universidad Nacional del Litoral (UNL) conversaron con especialistas para establecer qué debemos hacer y cuales son los motivos. Según determinan con la llegada de la creciente, muchas veces también llegan las noticias de ?invasiones? de ofidios en zonas donde normalmente no se detectan.

Gisela Bellini, del Laboratorio de Herpetología del Instituto Nacional de Limnología (Inali) indicó algunas recomendaciones en caso de encontrar yararás: ?Son víboras venenosas, por lo cual hay que acudir a un médico lo más rápido posible, porque hay que aplicar suero antiofídico. Sin embargo, no significa que una persona mordida corra riesgo de vida inmediatamente?, aclaró.

?Si uno se encuentra con una yarará asoleándose, algo que en Santa Fe es bastante común, no hay que interactuar con ella. La gente tiende a matarlas, lo cual es más peligroso que evitarlas, porque los animales tienden a defenderse y atacar. Si uno no les hace nada, es probable que ellas tampoco?, informó.

Bellini dijo además que las personas que realizan labores en zonas donde podrían tener contacto con yararás deben calzar botas o polainas de cuero. ?El 70 por ciento de las mordeduras de yarará ocurren desde la rodilla hacia abajo. También es bueno usar guantes de cuero, más que nada cuando haya que remover palos o escombros. Además, hay que evitar transitar por zonas con pastos altos, ya que allí son menos visibles. Asimismo, es preciso no generar depósitos de basura donde podría haber roedores, que son el alimento de las yararás?, sostuvo.

?En caso de ser mordido hay que trasladarse urgente a  un centro de asistencia médica. No usar torniquetes, ni aplicar cortes, que podrían producir hemorragias porque las yararás aplican un veneno anticoagulante?, manifestó.

Por último, Bellini destacó el rol que tienen estos animales en el ecosistema al regular la población de roedores: ?Las ratas son vectores de muchas enfermedades para los humanos, un problema más relevante que el de las mordeduras de serpientes, que registran un bajo índice?, finalizó.

Fuente: Universidad Nacional del Litoral