El primer bombero de Oliveros, Narciso Ruiz, se emocionó al hablar del homenaje que recibió en la inauguración del primer monumento fuente de América Latina, frente al cuartel que ayudó a fundar. “Para mí es un privilegio este homenaje. También ver lo que se logró para el pueblo”, expresó Ruiz.

Ruiz conducía el camión regador de la comuna y oficiaba de bombero ante las urgencias. Por su proactividad y disposición fue ayudante de los bomberos zapadores de San Lorenzo, y cada vez que había un incendio en la zona, sobre todo forestal en celulosa, él estaba presente.

Al notar su actitud de hacer, el comisario de entonces le sugirió la idea de armar un cuerpo de bomberos para Oliveros. El vecino aceptó el desafío, pero asumió no sabía por dónde empezar. Fue entonces cuando muchos actores se unieron: La comuna que prestaba el regador, la policía y vecinos con iniciativa que empezaban a gestar la idea como Daniel Damelio, que ya había comenzado a consultar las gestiones institucionales. 

Al principio, se ocupaban más de los incendios forestales, con el mismo camión regador de la comuna que habían adaptado para poder usarlo. Pero con el tiempo, lograron formar un cuerpo de bomberos que no cesó de crecer.

“Hoy es un sueño realizado ver todo lo que se logró en todos estos años, el pueblo luchó para que todo esto fuera realidad”, resumió emocionado Ruiz. Y cuenta con una enorme sonrisa que el cuerpo de bomberos costó un peso, porque salieron a vender por la localidad el chancho móvil para recaudar fondos.

Al concluir, Ruiz destacó la importancia de trabajar unidos, nunca dejarse vencer y siempre seguir adelante: “Ellos lo lograron y seguro que va a seguir creciendo”.