La propuesta estuvo diagramada desde RFR con el aval del Club Sportivo Belgrano que prestó sus instalaciones. Participó un reducido grupo de mujeres. El doctor Luciano Magnini explicó los avances en la ciencia sobre el cáncer de mama. “Hay que perderle el miedo a la palabra cáncer”, resaltó.

“Hoy la mayoría de los casos de detección temprana de cáncer son curados”, explicó el doctor Luciano Magnini, ginecólogo y obstetra. Con una amplia trayectoria en mastología el médico brindó una charla distendida donde dio lugar a las mujeres presentes a sacarse todas las dudas.

“No todos los casos son iguales, hay mujeres que tienen cáncer y no tienen sus madres o hermanas, pero se recomienda en caso de que una madre haya tenido cáncer que su hija comience con los controles frecuentes una década antes”, describió Magnini. Que se disputo a romper con muchos mitos sobre la enfermedad.

“No es cierto que el aro del corpiño genere cáncer”, apuntó. “Tampoco es cierto que las pastillas anticonceptivas lo hagan, salvo en mujeres fumadoras”, agregó. Y así fue resolviendo una a una las consultas frecuentes en el consultorio al auditorio que escuchaba atento. “Es preciso hacer los controles. Un papanicolau anual evita un cáncer de útero. La mamografía debe hacerse desde los 40 años cada uno o dos años”, indicó.

Una charla que duró por más de una hora, y que fue muy productiva para las asistentes. En su mayoría mujeres, sólo tres hombres estuvieron presentes: Un doctor que lo acompañó, el que impartió la charla, y el organizador. Y como dato relevante el ginecólogo describió: “Los hombres también pueden tener cáncer de mama. Y es más, las hijas de un hombre que tuvo cáncer de mama tienen 10 veces más probabilidad geneticamente de desarrollarlo”.

Como consejo para evitar la enfermedad Magnini relató: comida sana, hacer ejercicio y evitar el estrés. Pero se cumplan o no las premisas se deben realizar los controles pertinentes. En las mujeres un papanicolau anual, y mamografías desde los 40 años. En caso de detectar alguna anomalía acudir inmediatamente a un médico.