El Ejecutivo nacional define su hoja de ruta legislativa para el próximo año y apunta a introducir modificaciones en la actual Ley de Salud Mental, con foco en las internaciones involuntarias y la creación de centros especializados.

De cara al período de sesiones ordinarias de 2026, el Gobierno nacional avanza en la definición de su agenda parlamentaria y pone la mirada en la Ley de Salud Mental, una normativa que podría ser revisada a partir de un nuevo proyecto impulsado desde el Ejecutivo.

Entre los principales puntos en análisis se encuentra la modificación del artículo que habilita las internaciones involuntarias, un aspecto que genera debate desde hace años y que volvió a tomar fuerza por el reclamo de familiares de pacientes y profesionales de la salud.

En ese marco, el oficialismo insistiría en la necesidad de avanzar en la creación de centros especializados y en la posibilidad de autorizar internaciones en casos puntuales mediante intervenciones judiciales, con el objetivo de dar respuesta a situaciones complejas que, según sostienen, hoy no encuentran un marco adecuado en la legislación vigente.

La discusión promete abrir un nuevo capítulo en el debate sobre el abordaje de la salud mental en el país, con posiciones encontradas y un tema sensible que atraviesa al sistema sanitario, judicial y social.