Ayer, la localidad de Monje se llenó de color y alegría para celebrar el Día del Niño, con una actividad única organizada en el predio del ferrocarril. La propuesta “Volando Alto”, que forma parte del programa del Ente Cultural Santafesino, reunió a vecinos de todas las edades en una jornada que invitó a los más pequeños a elevar sus barriletes, creados artesanalmente con sus propias manos.

El objetivo de este evento, que se replicó en distintas localidades de la provincia, fue que cada niño tuviera la oportunidad de compartir su arte. Con el cielo como escenario, los barriletes tomaron vuelo. El encuentro promovió la interacción entre generaciones, y tanto padres como hijos compartieron risas y experiencias bajo el sol.

Uno de los momentos más destacados fue el reconocimiento al barrilete de Zoe González, que fue seleccionado por permanecer más tiempo y alcanzar la mayor altura en su vuelo.

El evento no solo fue un festejo para los niños, sino también un momento de encuentro. “Volando Alto” brindó a los habitantes de Monje una jornada de alegría, creatividad y colaboración, con el cielo como testigo de una tradición que fomenta el trabajo en conjunto y el disfrute de lo simple. Así, la localidad celebró el Día del Niño de una manera única.