Pasadas las 20 de ayer, el salón central de la escuela 294 de Maciel comenzó a poblarse. Las sillas blancas, que parecían un montón de pronto comenzaron a ocuparse, hasta quedar apenas algunas libres. Muchas mujeres. La luz se apagó y en el escenario comenzó a rodar “Heridas que no cierran”. 

Norma Zeiter, es profesora del teatro del Liceo Municipal de Gálvez y directora de la obra. Amsafe fue el nexo entre la propuesta y el lugar de presentación, una sumatoria que les permitió a los macielenses reflexionar a través del arte. “Creí que no iba a venir tanta gente, no conozco la cultura ni la idiosincrasia de Maciel, había muchas adolescentes, a veces es habitual que ellas crean que esta bien que tu chico te trate mal o que te controle, que te busque todo el tiempo, que te cosifique, es importante que se hayan acercado”, contó luego de terminar la obra Zeiter.

Como detalle adicional le soprendió la presencia del cura párroco: “Me llamó mucho la atención el cura, fue el único lugar que fuimos que se acercó una personalidad de esa jerarquía, nos interesa tanto llegar a esos lugares, como iglesia, política, un intendente, la policía”, destacó la directora.

Dentro del teatro del Liceo Municipal de Gálvez trabajan con niños, adolescentes y adultos, pero con este grupo en particular plantearon la temática de la violencia de género: “La empezamos a trabajar con escenas, con textos encontrados y otro poco con textos inventados y pudimos ir dándole formato a las escenas que cada una muestra una clase social diferente, una edad diferente y un vínculo diferente, no sólo se trata de la violencia entre el hombre y la mujer sino que también existe entre compañeros de trabajo, entre una madre y un padre, entre un suegro y un yerno, entonces, nuestra pretensión es llegar a todos los sectores de la sociedad”.

La obra presentada tuvo momentos crudos, de impacto, ante al atento silencio de los espectadores: “Para nosotros fue un proceso shockeante, mientras armábamos escenas, mientras leíamos los textos, fue un recorrido bastante largo y después de los ensayos individuales de cada escena tuvimos que ensamblarlas para darle un formato general”.

En escena son una veintena de artístas. La docente contó que el trabajo superó hasta incluso sus expectativas: “La obra la planteamos como una muestra de fin de año del Liceo Municipal de Gálvez, pero para algunas personas fue movilizador y con referencia al mes de la mujer, a un par de gremios se le ocurrió invitarnos”. Y continuó: “Nuestra idea entonces es conmemorar a través del arte, del teatro que es lo que humildemente sabemos hacer mostrando esto, pretendiendo llegar a los lugares donde se nos convocó”.