Timbuense escribió la página más gloriosa de su historia y se consagró campeón de la Liga Regional Totorense de Fútbol 2025, logrando su primer título en Primera División. “El indio” coronó un año inolvidable en su cancha, ante su gente, y con una final que tuvo fútbol, emoción y un comportamiento ejemplar dentro y fuera del campo de juego.
El equipo de Alejandro Fernández ratificó todo lo bueno que había mostrado a lo largo de la temporada. Tras igualar sin goles en la ida, supo manejar la final con inteligencia y carácter. En el partido decisivo golpeó en los momentos justos, fue sólido desde mitad de cancha hacia adelante y controló el desarrollo aun cuando el trámite se volvió tenso en el complemento. El descuento de Club Maciel le puso suspenso al cierre, pero Timbuense sostuvo la ventaja y celebró con justicia.
Más allá del resultado, el campeonato tuvo un fuerte valor simbólico. Timbuense esperó 36 años para dar este golpe, demostrando que con convicción, trabajo y proyecto se puede competir de igual a igual con los históricos de la liga. Sin tener uno de los presupuestos más altos, el club desarmó prejuicios y dejó un mensaje claro: Creer también juega.
El reconocimiento fue doble. La final mostró un clima ejemplar entre jugadores e hinchadas, y el título premió a un cuerpo técnico y a un plantel comprometido con una idea. Alejandro Fernández, fiel a una escuela de juego y conducta, llevó a Timbuense a lo más alto con un equipo que siempre intentó jugar y proponer.
El cierre de temporada fue soñado: Campeón en Primera, campeón en futsal y subcampeón en Reserva. Un año que quedará marcado para siempre en Timbúes y que confirma que este Timbuense no fue una sorpresa, sino el merecido campeón de la Totorense 2025.

