El fútbol tiene momentos de gloria, de esfuerzo y de alegrías compartidas. Pero también guarda espacios para la memoria y el reconocimiento. Así ocurrió en la tarde de este jueves, cuando las divisiones juveniles e infantiles de PSM Fútbol rindieron un sentido homenaje a Soledad Piedrabuena, la preparadora física que dejó una huella imborrable en la institución y en cada uno de los chicos a los que acompañó con dedicación.
Los jugadores ingresaron al campo de juego con una bandera en su memoria, carteles, fotografías y letras que formaron la frase “Sole por siempre”. El silencio se volvió absoluto durante un minuto que unió a futbolistas, cuerpo técnico, familias y público en una sola emoción: La gratitud y el cariño hacia la profe que partió demasiado pronto.
Desde el club, la recordaron con palabras que condensan lo que muchos sienten: “Gracias por todas las enseñanzas, profe. Tu pasión, tu compromiso y tu calidez quedarán siempre en el corazón de PSM Fútbol. Nunca te olvidaremos”.
El fallecimiento de Piedrabuena, ocurrido días atrás, generó un profundo dolor en todo el fútbol regional. Su legado no se mide solo en entrenamientos o resultados deportivos, sino en el vínculo humano que construyó con cada jugador y familia.
En la tarde del homenaje, quedó claro que su presencia sigue viva: En la bandera, en los aplausos, en las lágrimas y, sobre todo, en el recuerdo que permanecerá en cada rincón de PSM Fútbol. Porque como dijeron los chicos, y como repite toda la comunidad: “Sole por siempre”.
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