Desde que tomó estado público la foto del cadáver de Aylan Kurdí, el niño retratado en una playa turca sobre el mar Egeo, poniendo en foco internacional el conflicto de los desplazados dentro del mundo árabe, nuestro país no es el lugar que eligen los refugiados a pesar de la solidaridad de la gente. La razón fundamental es que Siria queda muy lejos de Argentina.
Una de estas razones la explica el cónsul de Siria en Córdoba, Abdala Saddi, cuyo nombre trascendió en las redes sociales con un número de teléfono para que los argentinos interesados en recibir refugiados sirios puedan hacerlo; además circularon fotografías antiguas equivocadamente sobre refugiados que llegaban a los puertos.
?Quería aclarar que esas fotos que se ven con personas llegando al puerto de Buenos Aires que se ven en las redes sociales son antiguas, del año 1991 y eso generó una demostración de sensibilidad de solidaridad con los refugiados del pueblo sirio que abandonan sus casas con tal de salvar sus vidas frente al terrorismo feroz. Quiero agradecer la solidaridad del pueblo argentino, de los más de 300, 400 llamadas ofreciendo ayuda, asistencia, domicilio para los refugiados, otros que buscan tener chicos sirios huérfanos, hay muchos matrimonios que quieren adoptar también?, explicó Saddi a Fm IRÉ.
El cónsul negó tener información concreta sobre la llegada de refugiados sirios a nuestro país: ?Esto depende del gobierno nacional a través de su cancillería, lo que es el ingreso de sirios, pero estamos en el fin del mundo, Argentina dice que va a financiar pasajes, tickets, pero no sabemos nada de eso, apenas tengamos una comunicación a nivel nacional lo publicaremos. No hay un anuncio real de que en 20 o 30 días lleguen familias? aseguró el cónsul.
Desde el año 2013 existe el Programa Siria, lanzado por el gobierno argentino, para refugiar a sirios en nuestro país, otorgando una visa temporaria: ?Existe un programa, donde pueden llamar para que lleguen al país, está dispuesto desde el año pasado, donde se hacen los trámites y mediante una carta de invitación bajo firma de escribano público y eso demora cuatro a seis meses hasta que se otorga o no la visa, para evitar el ingreso de terroristas?, sintetizó Saddi.
?Es una guerra injusta e impuesta, hay intereses políticos, económicos, religiosos, son países que fabrican armas y que financian a los terroristas. Es vergonzoso e inmoral donde la gente tenga que sufrir el miedo el pánico y que tenga que irse de su hogar. Es humanamente imposible ver como degollan la cabeza de un niño en los brazos de su madre o de su padre?, relató el cónsul.
?Queremos la paz, pero no hay interés en que se termine el conflicto. El Papa está desesperado para que se termine esto con el pueblo sirio y lo valoramos. Hay musulmanes, ortodoxos, católicos, shiitas, sunitas, de todo tipo que convivieron bajo una misma bandera pero ahora todo cambió?.